ACTITUDES Y APRENDIZAJES A TENER EN CUENTA PARA UNA TERCERA EDAD CON CALIDAD DE VIDA

Recomendaciones del director de Enfermería del Centro de Salud Hermanas Hospitalarias de Palencia, en España, Dr. Emilio Negro González.

Es un hecho que el envejecimiento se viene con fuerza en una gran generación de hombres y mujeres que abrieron brecha en el desarrollo y crecimiento de las sociedades en muchas partes del mundo. Lo cierto es que de cara a la nueva etapa de la vida que es la tercera edad, hay que asumir actitudes y aprendizajes nuevos que los ayuden a tener un estilo de vida saludable con una actitud mucho más positiva.

“Actitudes y aprendizajes adquiridos en la madurez de la vida se convierten en factores protectores, o por el contrario, pueden llegar a ser hábitos que pongan en riesgo nuestra salud en la tercera edad”, precisa, por ello la importancia de tomar en cuenta lo siguiente.

• Mejorar la actividad física. Pasear a un ritmo que active nuestro organismo, andar con amigos o formar parte de algún grupo de actividad física que nos permita mantener una vida social y activarnos en aquellos momentos que las condiciones son más negativas en esta etapa de la vida. Por ejemplo, hacer tai chi, jugar a los bolos, hacer caminatas entre amigos de la tercera edad. Y si usamos bastón, este puede ayudar a mantener el equilibrio y mejorar la seguridad.
• Practicar la alimentación sana. En la tercera edad es bueno olvidarse de los precocidos y las azucares en exceso, y mantenerse activo con la ingesta de frutas y verduras de la temporada. Consumir proteínas como el pescado, el pavo y el pollo. Y para aumentar la fibra en el cuerpo, los cereales con grano entero y las legumbres son muy buenos. Así como también los lácteos en forma de yogurt o leche. Durante la tercera edad, es importante balancear lo que te gusta mucho a menos veces y en pocas raciones, dando cabida a la calidad de alimentación para bien de tu salud.
• Dormir bien. Lo importante es llegar a la noche con las mejores condiciones de sueño sin tomar en cuenta los problemas que puedas haber tenido durante el día.  Por tanto, una siesta si es de menos de 20 minutos es la adecuada. Pero consumir fármacos para ayudar a dormir es lo menos recomendable. Recuerda que parte de hacer una adecuada actividad física en la tercera edad, es lo que redundará en tu calidad de sueño.
• Vida social activa. Abrir la puerta a nuevas amistadas en esta etapa es más que recomendable, debe ser una prioridad, porque el aislamiento y la soledad no son las mejores compañeras en la tercera edad. Por eso, busca tareas de voluntariado, realiza visitas familiares, programa encuentro de amigos. Utiliza tu experiencia profesional y de vida para el servicio de tu comunidad.  El propósito debe ser afrontar de la mejor manera los cambios que se van presentando por la perdida y distanciamiento de seres queridos.

  

  
  
• Abandonar la automedicación, el alcohol y tabaco. Es muy común en la tercera edad, automedicarse a fin de no ir al médico con la expectativa que pronto se pasará el dolor, pero lo cierto es que el consumo de fármacos debe ser limitado en el tiempo, prescrito por los médicos y conociendo los efectos secundarios que puede causar en la persona. Es sabido que el consumo de alcohol incrementa el riesgo de sufrir otras patologías, pero lo cierto es que su consumo hace que se tome menos agua por lo que aumenta la deshidratación. Por eso es importante cambiar su consumo progresivamente por el de agua en cantidad de dos litros al día, esto ayudara a ir disminuyendo otras bebidas como vino y licores. Por otro lado, el riesgo de consumir tabaco es que incrementa el riesgo de padecer enfermedades como el cáncer, cardiovasculares, respiratorias. Sin tabaco se mejora la calidad de vida en la tercera edad.

Por último,  el conjunto de experiencias positivas que consigamos en la vida harán que en la etapa de envejecimiento se pueda superar cualquier adversidad con mayor capacidad.

Editado por @TerceraEdadDigital. Tomado de Geriatricarea.com

Fuente: http://geriatricarea.com/actitudes-y-aprendizajes-en-la-tercera-edad/